Hoy he pensado hacer un platillo informal que nos sirva de tapa o acompañamiento para un buen vino o una cerveza fresquita, además, claro está, de ir quitando de en medio ingredientes. Hoy ya llego un poco tarde para la hora del aperitivo, pero nos vale también para cena.

Necesitaréis:

• 50 gr de patatas monalisa ya peladas
• 50 gr de queso de cabra (rulo – que nos sobró después de hacer la hamburguesa-)
• 1 huevo
• Unas lascas de jamón o paleta ibérica (si después de las navidades ya se os ha quedado el jamonero vacío, comprar un paquetito de 100gr, que lo usaremos muy pronto – antes de que os de la tentación de coméroslo entero-)
• 100 gr de tomate raff o pera, no muy maduro (comprar 2, que el segundo lo usaremos en breve).
• 2 cucharadas de vinagre de módena
• Sal
• Pimienta negra
• Aceite de oliva

Cortar las patatas peladas y limpias en rodajas de 3 mm de grosor, meterlas en un cuenco con agua que las cubra y ponerlas en el microondas a potencia máxima durante 4min 30 seg, escurrir y secar con papel de cocina.

Poner una sartén al fuego con una cucharada de aceite de oliva al 70% de potencia. Cuando esté caliente, poner las patatas y cocinar 2 minutos por cada lado. Sazonar, sacar y disponer formando una capa en el fondo de nuestra cazuelita (debe ser apta para el microondas, ¡que no sea de metal!).

Mientras tanto, podemos ir cortando el tomate en rodajas (4 milímetros de grosor) y lo haremos también en sartén 2 minutos por cada lado. Pero en este caso, al darle la primera vuelta, aprovecharemos para salpicar los tomates con el vinagre de Módena y también una pizca de sal. Cuando lo tengamos, poner en la cazuela formando otra capa sobre las patatas.

La tercera capa, será la rodaja de queso de cabra, que pondremos directamente sobre los tomates. La cuarta, serán las lascas de jamón, que colocaremos sobre el queso.

Ahora llega lo más complicado, jejeje. Nos toca poner otra sartén al fuego (70% de potencia) con un fondo de 6 mm de alto de aceite de oliva virgen extra, dejar que se caliente 3 min o hasta que empiece a humear y … ¡a freir el huevo! Para que sea más fácil, podéis cascarlo y verterlo en un vaso antes de echarlo a la sartén. Con la rasera lo vais salpicando con el aceite caliente para que se haga por encima también.

Mientras se calienta el aceite, podéis aprovechar para el penúltimo paso: poner la cazuelita tapada al microondas, a la máxima potencia, durante 1 minuto y 30 seg. (así se derrite el queso de cabra y se vuelve a templar las patatas y los tomates, que pueden haberse quedado fríos).

Sacamos el huevo del aceite, escurriendo bien, y ponerlo como la capa superior de nuestra cazuelita. Añadir un pelín más de sal y pimienta negra recién molida al gusto.

Servirlo acompañado de unos picos de pan y cucharita, ¡la mejor herramienta para romperlo!