Perdonadme amigos míos porque con esto de las vacaciones los plazos se me están yendo de madre. Acabo de venir de un viaje a Berlín y Polonia y de coger un montón de ideas para las próximas recetas… ¡os van a encantar! Pero mientras hago las pruebas, saco las recetas, las fotos y las redacto, no os voy a hacer esperar más y sigo compartiendo con vosotros recetas ideales para esta época de vacaciones.
La de hoy, fresquísima y sabrosa, es una receta ideal para tener preparada con antelación y devorar al volver de la playita. ¿Vamos con los ingredientes?
Para una ración de tabulé oriental necesitaréis:
- 50 gr de couscous (sin cocinar)
- 8 gr de cebolleta
- 10 gr de pimiento rojo
- 2 kumatos cherry
- 4 gramos de pasas (=1 cucharadita) bien blanditas
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
- El zumo de medio limón pequeño
- 2 hojitas de menta fresca.
Para prepararlo, lo primero que haremos será pesar el couscous en un vaso medidor, nos fijaremos en la altura que alcanza en el vaso y lo pasaremos a un cuenco. Cogeremos el mismo volumen de agua y lo pondremos a hervir en un cazo. En cuanto hierva, lo vertemos sobre el couscous y dejamos que se empape durante un par de minutos, tras lo cual añadiremos sal, removeremos y dejaremos reposar de nuevo.
Utilizaremos los intervalos de “cocinado” del couscous para ir picando la cebolleta, el pimiento, los kumatos, las pasas y una de las hojitas de menta (la otra la dejaremos para decorar).
Cuando lo tengamos todo picadito, volveremos al couscous, al que añadiremos la cucharada de aceite de oliva y el zumo de limón. Removeremos bien y, cuando los granos estén sueltos, añadiremos las verduras picadas. Removemos una vez más y servimos decorando con la hojita de menta que habíamos reservado.
¿Fácil, eh? 😉 Pues a aprovechar el resto del tiempo para disfrutar del veranito. Yo también haré lo propio. Jejeje.
Besos!!