No podemos dejar pasar la oportunidad que se nos brinda al tener en nuestra nevera la pasta de curry rojo y el resto de leche de coco que usamos ayer. Para darles uso, vamos a cambiar el ingrediente principal, metiendo pollo en esta ocasión y haciendo una versión un poco más “cañera”. Me refiero a que, si pudisteis bien con el picante de los langostinos… ¿porqué no darle un poco más de potencia? Jejeje… Vamos a por ello, aunque, si no os atrevéis, libertad absoluta para poner menos cantidad de curry, ¿ok?
Necesitaremos para una ración de nuestro curry de pollo:
- 220 gr de pollo (solomillitos o pechuga, para que podamos hacer tacos con ello)
- 45 gr de arroz para guarnición (del que tenemos empezado tras el último curry. Si vais a hacer las dos recetas seguidas, podéis cocerlo todo de una vez y reservar la mitad en la nevera entre un plato y otro)
- 70 gr de cebolleta picada (de la que habíamos empleado para la Ensalada de Salmón Marinado)
- 30 gr de zanahoria
- 1,5 cucharadas de pasta de curry rojo (del que hemos empezado para el Curry Thai de Langostinos)
- 200 ml de leche de coco (igualmente, del que empezamos para el Curry Thai)
- 1 ramita de cilantro (también, como los dos anteriores… jejeje)
- 3 cucharadas de aceite de girasol
- Sal
Para preparar nuestro curry de pollo, al igual que en la receta anterior, lo primero que haremos será cocer el arroz que nos servirá de guarnición, en abundante agua hirviendo con sal, siguiendo las indicaciones del fabricante. Si ya lo tenéis cocido de la receta anterior, ¡una cosa menos! Podéis pasar directamente a preparar el curry, porque en este caso no saltearemos el arroz después de cocido, sino que simplemente lo escurriremos y mantendremos caliente hasta que termine de hacerse el curry.
Para preparar el pollo, lo primero que haremos será picar las hortalizas. Cortaremos la zanahoria en cubitos de unos 0,5 cm de lado y la cebolleta en tiras un poco más grandes que en el curry anterior: como de 1 cm de ancho y 2,5 cm de largo. Reservamos en un plato y, por otro lado, cortamos el pollo en tacos de unos 2cm de lado, aunque no hace falta que sean regulares del todo.
Cuando lo tengamos, pondremos una cazuelita pequeña al fuego, al 60% de potencia, con las tres cucharadas de aceite de girasol. Cuando éste esté caliente, añadiremos la cebolleta y rehogaremos durante dos minutos, tras ello, añadimos la zanahoria y rehogamos todo junto durante 6 minutos más.
Ahora, que ya tendremos pochadas las verduras, lo que haremos será añadir a la cazuela la pasta de curry rojo y los tacos de pollo ligeramente salados. Le damos una pequeña vuelta para que el pollo se selle e, inmediatamente después, añadimos también la leche de coco y la ramita de cilantro picada. Bajamos el fuego y dejamos cocinar todo durante 9 minutos más. Apagamos entonces el fuego, probamos y corregimos de sazón y finalmente servimos el curry acompañado del arroz (y de un vaso de agua al menos, jejeje).
Buen provecho!!!