Esta receta es súper-sencilla, sana y sabrosa (las tres “S”) y aborda uno de los ingredientes que más guerra dan: los champiñones. ¿Quién no ha comprado alguna vez una barqueta que se hace eterna y acaba criando “pelitos” en la nevera por menos de ná? Por lo menos yo lo he sufrido más de una vez, por eso, siempre que puedo, intento comprarlos a granel. Hoy me he dado el gustazo y he comprado 200 gr en el Mercado de Chamartín, que me servirán para esta receta y la siguiente. Si tenéis ocasión, visitadlo, que está precioso y tiene muy buenos productos.
Para preparar el carpaccio necesitaremos:
- 2 cucharadas de zumo de limón recién exprimido (del que nos sobró “pelado” después de hacer el arroz con leche)
- Aceitunas negras sin hueso al gusto (de las que quedaron después de adornar el bacalao).
- 150 gr de champiñones
- 4 cucharadas de aceite de oliva
- Sal gorda (una buena cantidad)
- Sal normal
- 1 ramita de perejil
Precalentar el horno a 220 grados. Lavar y cortar las aceitunas negras, a lo largo, por la mitad. Preparar en una fuente de horno una buena capa de sal gorda, poner las mitades de aceituna sobre ella boca abajo y, sobre ellas, otra buena capa de sal. Os pongo una foto de ejemplo.
Metemos la bandeja en el horno, ponemos la posición arriba y abajo con ventilador (si tenemos) y horneamos unos 20 min.
Mientras las aceitunas se hornean, lavar y quitarles el pie a los champiñones. Yo recomiendo además pelarlos (la piel se saca bien con el borde del cuchillo si tiramos desde el pie). Dependerá de la prisa que tengáis, pero si los peláis, el aliño penetrará mejor en la carne del champiñón. Cortarlos después en finas lonchas y disponerlos en el plato en círculos concéntricos.
Preparar el aliño con las 4 cucharadas de aceite, las dos de zumo, una pizquita de sal y el perejil bien picado. Lo metemos todo en un botecito (como hicimos en la receta de la “Ensalada Ibérica”), tapamos y lo agitamos bien cual coctelera. Luego, repartir este aliño de manera uniforme sobre los champiñones, con ayuda de una cucharilla, para que todos los champiñones tengan su poquito de salsa 😉
Si llegado este punto ya han pasado los 20 min de las aceitunas, sacar la bandeja del horno, apagarlo, jejeje, y sacar las aceitunas de la sal, con cuidado porque estarán muy calientes. Les quitamos entonces los restos de sal que puedan tener pegada y los cortamos en cubitos pequeños (como de 2x2mm). Ya tendremos entonces los “chips” de aceituna negra, que esparciremos sobre el carpaccio y ¡lo tendremos listo! Espero que os guste, está muy sabrosona esta receta!!
Nota: Os recomiendo hacer los chips con todas las aceitunas que os sobraran de la receta del bacalao, pues es una forma de conservarlas y además son muy resultonas para otras preparaciones (ensaladas, focaccias, sándwiches, etc.). Si no os llama mucho la atención y queréis conservar las aceitunas más tiempo, os recomiendo no tirar el caldo de la lata en la que vienen. Si lo echais por contra en un frasquito de vidrio, ponéis ahí las aceitunas sobrantes y lo guardáis en la nevera, pueden aguantaros un par de semanas mínimo.